Al reconocer la complejidad de las situaciones actuales que han impactado a la comunidad universitaria, como la pandemia, temblores, tormentas y posibles huracanes, el estudiantado del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) se cuestiona cómo será el próximo semestre con modalidad híbrida.
El semestre pasado, especialmente durante los primeros meses de la pandemia, estudiantes del recinto evidenciaron en las redes sociales distintas situaciones en las que, con la justificación de la libertad de cátedra, hubo profesores que, al dar clase, afectaron significativamente al estudiantado. Así lo confirmaron alumnos del RUM mediante un cuestionario de este medio gestionado durante el mes de junio.
Los colegiales coincidieron en que muchos de sus profesores utilizaron su posición de poder como una forma de librarse de sus cargos y no ser empáticos, desaparecer por meses, enviar presentaciones de clases incompletas, hacer exámenes y trabajos más complicados de lo que hubieran sido presencialmente, y que algunos no tuvieron compasión con aquellos estudiantes que se quedaron sin luz o internet durante una evaluación.
La encuesta, realizada por Pulso Estudiantil, tiene un nivel del confianza de 95 por ciento y margen de error de 12 por ciento.
Es importante reconocer que el sistema eléctrico, de comunicaciones y educativo no estaban preparados para un evento como la pandemia, lo cual se les ha hecho imposible abastecer a todas las personas que se encuentran en sus casas y necesitan de estos servicios. Así también hay estudiantes que no contaron ni cuentan con servicio de internet y acceso a computadora, lo que les complicó el proceso de adaptación.
Ante un nuevo año académico
La matrícula para el próximo semestre en el RUM es aproximadamente de 12,500 estudiantes, considerando la suma de cerca de 2,300 estudiantes de nuevo ingreso.
El Recinto Universitario de Mayagüez cuenta con la oficina del Centro de Recursos para la Educación a Distancia (CREAD) que se encarga de ofrecer adiestramientos a profesores sobre cómo manejar las clases a distancia, atender estudiantes por foros, corregir exámenes, entre otras gestiones. Con el fondo del Cares Act, la universidad asegura tener el presupuesto para satisfacer las necesidades de la oficina durante estos tiempos. Por otro lado, ante el reciente anuncio de clases híbridas, se han identificado aproximadamente 45 salones aptos para recibir estudiantes y cumplir con las reglas del distanciamiento social y seguridad.
Además de la lista de laboratorios y actividades presenciales publicada por la universidad el 13 de julio, también se ausculta la posibilidad de que los exámenes se manejen de manera presencial, una decisión que recae sobre el docente, quien tendrá que explicar el motivo y reservar un espacio a través de un sistema designado. Aquellas clases que cuenten con exámenes presenciales serán notificadas a los estudiantes durante la primera y segunda semana de agosto para realizar los preparativos, mientras que el horario será el mismo de la clase.
“Hemos preparado unas guías que siguen todos los lineamientos de ley y reglamentos en términos de privacidad, cómo se sienten los estudiantes y el manejo de información para que sea más estricto el manejo de exámenes a distancia”, expresó Rullán Toro, rector del RUM, en entrevista con Pulso Estudiantil.
Respecto a la gestión de exámenes a distancia, mencionó la opción de monitorear mediante grabación a los estudiantes. Resaltó que es una modalidad que implica mucha responsabilidad para el profesorado ya que, a la vez, este tendría que proteger la privacidad del estudiante y, de grabar la sesión, deberá utilizar plataformas oficiales de la universidad.
Así también, el rector expresó que todas las clases se estarán ofreciendo, no obstante, aunque tengan ofrecimiento completo, se está trabajando para que se cumplan los protocolos y medidas de salubridad correspondientes en el recinto. Además especificó que se evaluará curso por curso para determinar si se encuentran dificultades para ofrecer las sesiones y, de ser así, se cerraría la clase.
Seguridad en el recinto
Por otro lado, sobre el manejo y seguridad del estudiantado y el personal de la comunidad, la institución requiere el uso de mascarillas que cubran la boca y nariz en todo momento, así como el lavado frecuente de manos. Se prohíbe totalmente el aglomeramiento de personas. La institución se encargará de equipar los baños con jabón, papel y se encontrará desinfectante de manos en aquellas áreas en donde se ofrezcan servicios al estudiantado, confirmó Rullán Toro.
El rector del RUM también se expresó referente a aquellos estudiantes inmunocomprometidos: “Se considera que es importante que el estudiante minimice su actividad presencial, quizás debe posponer los laboratorios que requieran presencia en el recinto”. Por otro lado, la administración no cree que tenga el presupuesto para hacerle la prueba de COVID-19 a toda la comunidad universitaria, además del que sería una muestra de ese día, ya que las personas podrían recibir un resultado negativo y ser positivo por haberse expuesto después de hacerse la prueba.
Respecto a la seguridad en los cursos, según el rector y el estudiantado, el semestre pasado estuvo muy cargado académicamente, además de que no contaban con un Cuestionario de Opinión Estudiantil (COE) que recogiera este tipo de situación ante todos los casos que se reportaron de deshonestidad académica, abuso de los profesores con la libertad de cátedra y el manejo del cambio de clases presenciales a la modalidad en línea. Para el semestre entrante, se podría implementar el COE para cursos híbridos y a distancia.
Estudiantes internacionales
Rullán Toro también se expresó sobre la situación de los estudiantes internacionales y el U.S Immigration and Customs Enforcement (ICE, por sus siglas en inglés) en la que el gobierno de Estados Unidos busca forzar el regreso de estos alumnos a su país natal de no tomar clases presenciales.
Respecto a la situación, el rector mencionó lo siguiente: “Yo creo que quieren forzar la mano de las universidades para que abran todas las actividades presenciales […] yo no creo apropiado usar esas reglas para que nosotros tengamos que decir que vamos a abrir para conservar a nuestros estudiantes internacionales”.
El rector considera injusto tener que decidir si quedarse con los estudiantes internacionales o ponerlos en riesgo con actividades presenciales obligadas.