Por: Catherine E. Cintrón Pérez/MNNB
El Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) celebró el viernes su primera Asamblea General del año académico, en la cual el estudiantado realizó una serie de reclamos hacia la rectora interina del recinto, Wilma Santiago Gabrielini, mediante una carta titulada “Estimada rectora interina del RUM”.
En la carta dirigida a la rectora de la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Mayagüez, los estudiantes mencionaron distintos asuntos que les afecta como matrícula del Colegio. Ente los puntos discutidos estaba: el deterioro de la infraestructura, la calidad de servicios en el Colegio y casos de acoso sexual.
Los estudiantes enfatizaron que de no obtener respuesta en o antes del próximo viernes, 2 de noviembre, Santiago Gabrielini se debe atener a tres consecuencias: una manifestación pacífica, un paro estudiantil y la solicitud de su renuncia inmediata.
Algunos de los reclamos de la carta “Estimada rectora interina del RUM” son:
• Parte del edificio de Ingeniería Química lleva clausurado desde hace más de dos años y seis meses debido a un incendio en el edificio en marzo del 2016, lo que dejó a los estudiantes sin recursos de laboratorio. Según la carta, la Administración central no proveyó el dinero para el arreglo del edificio.
• El edificio de Biología no cuenta con un acondicionador de aire desde hacen tres años, y por su localización no tienen ventilación, lo que pone en riesgo la salud de la comunidad universitaria y afecta las investigaciones estudiantiles que dependen del control de temperatura. Por otra parte, todavía existen salones y anfiteatros cerrados por daños tras el huracán María. Además, mencionaron que algunos ascensores de la Universidad no funcionan desde hace tres años, y otros tienen los certificados de inspección expirados.
• Los estudiantes también pidieron que se mejore el uso del correo electrónico Calidad de Vida, en el que se envían informes de actos delictivos en la Universidad, ya que estos informes están llegando meses más tarde o simplemente no los envían.
• Además, profundizó en que el Programa de Servicios Psicológicos no da abasto para tantos estudiantes y que los empleados necesitan mejores adiestramientos. En la carta se alega que a un estudiante un empleado le dijo que “podía venir el semestre que viene porque no se ve tan malito”. La carta indicó que este tipo de comentarios “pudiera ser un detonante para una persona suicida o que esté en depresión”.
• Los estudiantes reclamaron que una estudiante fue víctima de acoso sexual desde enero de 2016 hasta diciembre de 2017 por parte de un profesor que continúa trabajando en el Recinto. En la carta, se le exige a la rectora la firma de una nueva política de suspensión a cualquier individuo de la comunidad universitaria con casos vigentes de hostigamiento sexual con medidas terminantes como despido o expulsión, en caso de que se encuentre culpable.