Por: Desiree M. Ortiz Padilla
Varias familias y educadores de la niñez temprana a través de Puerto Rico se beneficiaron de los talleres “Construyendo la esperanza en la niñez y las familias después del desastre del Huracán María” impartidos por el Proyecto ALCANZA, que buscan fortalecer la salud y el bienestar en la isla luego del paso de María.
El proyecto, dirigido por la Dra. Annette López de Méndez, nació como respuesta a las distintas necesidades identificadas en un cuestionario tipo encuesta distribuido en todos los centros prescolares de Puerto Rico por el Centro de Investigaciones Educativas (CIE) de la Universidad de Puerto Rico (UPR) Recinto de Río Piedras desde el 1 de diciembre de 2017 hasta enero de 2018.
Los 169 centros, provenientes de 53 pueblos de la isla, que contestaron el formulario indicaron que sus necesidades inmediatas consistían en: adiestramientos en el manejo de emociones (82%), salud (40%), estrategias para proteger la comunicación (40%) y la creatividad (36%).
A partir de estas necesidades, 157 educadores de niñez temprana de los centros de cuidado y desarrollo ubicados en los municipios declarados como zona de desastre por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) recibieron una serie de talleres impartidos por el Proyecto ALCANZA.
“Entendimos que para poder ayudar a recuperar el país, era importante tocar el tema de la resiliencia y utilizar a los maestros como líderes transformadores y capaces de devolverle la esperanza a los niños y sus familias. Vi la importancia de ayudar a los educadores a entender cómo responder a una situación de adversidad y fortalecer la resiliencia en la niñez”, expresó López de Méndez.
El énfasis de los talleres fue capacitar a los educadores para entender y manejar las conductas que pueden presentar los menores frente a una situación de crisis. Los efectos de los desastres naturales en la vida de los niños, la resiliencia, la creación de actividades para apoderar a los maestros y las familias, y la fomentación del valor de los adultos como eje central que apoya la niñez para garantizar su bienestar fueron algunos de los temas principales de los talleres, los cuales se llevaron a cabo en la UPR en Cayey.
López de Méndez, quien también funge como catedrática de la Facultad de Educación de la UPR de Río Piedras, enfatizó que “para impactar a la niñez debemos primeramente fortalecer a los adultos a cargo. Son los adultos los que primero deben conocer, desarrollar las destrezas y actitudes necesarias relacionadas al concepto de la resiliencia, para luego ayudar a los niños”.
Los talleres se realizaron gracias a la colaboración entre el CIE, la Facultad de Educación de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y la División de Educación Continua de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Cayey. Por otro lado, la Fundación Ángel Ramos, dirigida por el Licenciado Rafael Cortés Dapena, auspició la iniciativa.