La administración de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras (UPR) aseguró hoy, viernes, que la residencia estudiantil Resicampus permanecerá abierta durante la emergencia del COVID-19 en la isla, ante la preocupación de los residentes de un cierre anticipado de la vivienda como parte de las medidas de la universidad para evitar la propagación del virus.
Resicampus es la única residencia en el recinto riopedrense accesible para personas de bajo ingreso, la cual continuará abierta hasta el próximo 27 de mayo, fecha acordada para su cierre. De surgir alguna emergencia relacionada al virus, la administración de la UPR evaluará otras opciones para evitar la propagación de la enfermedad.
Por su parte, estudiantes residentes rechazaron el cierre del alojamiento universitario durante la emergencia nacional, y advirtieron que un desalojo inmediato del edificio podría propiciar el contagio del Coronavirus.
“Llevar a cabo un desalojo con mudanza en medio de esta emergencia representa un riesgo para la salud de los estudiantes y sus familiares, ya que implica un proceso de conglomeración en el que todos estarán expuestos al contagio y propagación del virus”, expusieron residentes en un comunicado de prensa el pasado miércoles, 18 de marzo.
Este semestre, alrededor de 283 a 300 estudiantes están registrados como residentes en el edificio, y cerca de 13 dependen de las facilidades porque son alumnos internacionales.
“Responsablemente, recomendamos que aquellos estudiantes que tienen un hogar seguro en la isla, regresen y se mantengan aislados mientras dure esta emergencia, conforme a las directrices emitidas por el Gobierno de Puerto Rico. Los estudiantes internacionales o quienes no les sea posible retornar a su hogar en este momento, permanecerán en la residencia, pero deberán cumplir con las medidas establecidas”, declaró Mario Alegre Barrios, Ayudante Especial del rector en Asuntos de Prensa y Comunicaciones.
“A causa de la emergencia, más de la mitad de los estudiantes han regresado a sus pueblos, pero las pertenencias están dentro del edificio. Los y las estudiantes que están dentro, son extranjeros o tienen trabajos a los cuales tienen que asistir. De irse a sus pueblos, pierden sus trabajos”, explicó Viviana R. Calderón Rivera, estudiante de Drama quien está próxima a graduarse y se ha hospedado en Resicampus durante toda su trayectoria académica.
El cierre de la residencia estaba pautado para enero 2020 con el fin de iniciar el procedimiento de remodelación del edificio de 60 años de establecido. Sin embargo, la administración universitaria cambió la fecha para el próximo mes de mayo. Calderón Rivera explicó que, en enero, no se aceptaron solicitudes de estudiantes nuevos, y que los pisos siete y ocho ya se encontraban cerrados.
“Los instamos, de la manera más enfática, a observar rigurosamente el reglamento que cobija las residencias estudiantiles, y a cumplir con las instrucciones de prevención emitidas por el Departamento de Salud para evitar el contagio de este peligroso virus”, expuso Alegre Barrios.
Resicampus: la única opción para muchos estudiantes
La residencia universitaria es la única vivienda para estudiantes residentes de diversas partes de la isla. La disponibilidad de alojamiento para este sector de la población estudiantil empeoró tras el cierre de Torre Norte.
“Hay estudiantes que ahora mismo no tienen dónde ir, no tienen dónde vivir, y dependen del wifi de la universidad, en ResiCampus, para poder continuar su semestre. La administración ha comparado la situación con otras universidades que no tienen residencia. Sin embargo, la UPR no es una universidad privada. Además, el estudiantado de Río Piedras abarca una realidad diferente”, declaró Calderón Rivera.
Debido a la pandemia del COVID-19, todas las unidades de la UPR cancelaron las clases presenciales, y continuarán sus cursos en línea por diversas modalidades.
“Exhortamos a la administración que sea empática con sus estudiantes, y tomen medidas justas y claras ante esta situación. Como estudiantes y trabajadores, reconocemos la dificultad que puede representar para todas las partes involucradas, pero a su vez, esperamos que se pueda manejar de manera responsable y tomando en consideración las verdaderas necesidades del estudiantado”, concluyeron los residentes.