Por: Marivanis Berrios y Andrea Echandy
La confidencialidad, el intercambio de información y la colaboración han sido clave para el cambio de paradigma del periodismo, aseguró la subdirectora del Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés), Marina Walker Guevara.
En una conferencia realizada ayer, viernes, en la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Puerto Rico (UPR), la periodista explicó cómo se desarrolló el proyecto de los Panamá Papers, donde colaboraron 376 periodistas de 80 países distintos.
La paradigmática investigación surgió gracias a la filtración de 11 millones de documentos que suministró una fuente anónima —que se hace llamar John Doe— al periódico alemán Süddeutsche Zeitung.
Entre la información filtrada, se encontraban correos electrónicos, pasaportes, estructuras secretas y cartas. Estos archivos contenían datos que reflejaban la existencia de paraísos fiscales alrededor de todo el mundo.
En los paraísos fiscales se crean empresas ficticias —con dueños y accionistas falsos— que son utilizadas para lavar y esconder dinero, así como evadir el pago de contribuciones en su país de procedencia.
El periódico alemán compartió los datos con el ICIJ para que los distribuyera a todos los periódicos aliados, dando así un alcance mundial a la información. Además, se creó una plataforma en la que los periodistas participantes accedían los documentos para analizarlos.
Walker Guevara aseguró que la colaboración entre los colegas fue la clave para que esta publicación tuviera impacto mundial. Igualmente, motivó a otras fuentes a arriesgarse y filtrar informaciones similares como los Paradise Papers —donde se involucran empresarios y políticos estadounidenses—.
Asimismo, según la subdirectora, la publicación de estos archivos ha tenido un efecto transformador en la sociedad, pues convirtió a las víctimas en agentes de cambio.