Foto: Suministrada por Laura Ysabel Cruz Arroyo
Cuando una persona va creciendo, comienza a tener distintos sueños y empieza a investigar qué es lo que realmente quiere en la vida. Laura Ysabel Cruz Arroyo comenzó queriendo ser actriz, posteriormente descubrió la música y como si la vida fuese un cuento, se encuentra en su quinto año de estudios en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Mayagüez (RUM), completando su bachillerato en Ingeniería Mecánica y una concentración menor en Gerencia de Proyectos .
Con su mirada fija al horizonte, Cruz Arroyo mencionó que gran parte de su desarrollo como estudiante vino con ayuda de su abuela materna, Nilma “Molly” Méndez, y la educación pública.
Nació un 13 de mayo del 2000 y vivió en Las Marías, donde estudió en la escuela pública Segunda Unidad Lauro González hijo hasta cuarto grado. Luego, se transfiere hacia la escuela Mariana Bracetti en Añasco hasta sexto grado y finalmente de séptimo a 12mo grado en la escuela bilingüe Sergio Ramirez de Arellano – Hostos, ahora Alcides Figueroa. Debido a esto, siempre menciona que cuando le preguntan de dónde viene, dice que es de Las Marías y Añasco.
Cuando cursaba noveno grado, la estudiante del RUM tomó una decisión que cambiaría su vida. Decidió audicionar para La Voz Kids 3. Para esta temporada, Daddy Yankee era uno de los artistas invitados como jueces junto a Natalia Jiménez y Pedro Fernández. Así que cuando en su audición, los tres jueces dieron la vuelta, y Natalia le admitió que no desafinaba ni debajo del agua, la sangre la llamó y Daddy Yankee se convirtió en su “team leader”
“Fue una experiencia súper linda, porque de cierto modo fui una inspiración para los niños que me veían” comentó la añasqueña sobre su experiencia.. “Venían y me abrazaban…siento que de cierto modo fui inspiración para que siguieran sus sueños”, agregó.
“Yo era tímida así que me ayudó a salir de mi zona de confort”, resaltó.
Su carrera como cantante no culminó ahí. Laura Ysabel pasó a hacer un Tour con su primera canción titulada La Sangre me llama junto a Tony Costa en su Zumba Tour. Posteriormente, ingresó a la Escuela Libre de Música Ernesto Ramos Antonini en Mayagüez en la que logró ser parte de la producción de Hair Spray.
Su paso por la industria musical fue pausado cuando llegó la primera semana de su último año en escuela superior. La colegial fue llamada a la oficina para informarle que cumplía con todos los requisitos para comenzar la universidad temprano: tener por lo menos 3 avanzados y 1 proficiente en las pruebas METAS, un buen puntaje en el college board, un excelente gpa y cumplir con el IGS establecido para la carrera que pensaba elegir.
A sus 17 años, Laura dejó la escuela superior y comenzó su primer semestre como estudiante de ingeniería mecánica en la Universidad de Puerto Rico recinto de Ponce (UPRP). En su primer semestre, según relata, viajaba todos los días desde Añasco hasta Ponce, debido a que no había cupo en el RUM.
Para su segundo año, la estudiante logró ser transferida al Colegio de Mayagüez, donde perteneció a The Future Leadership Monetary Program y a The American Society of Mechanical Engineers (ASME).
Asimismo, sin darse cuenta de cómo la vida avanzaba sin ella darse cuenta, tuvo la primera oferta de Internado a sus 18 años, algo que normalmente comienza en el tercer año de universidad. Cruz Arroyo fue elegida para pertenecer a International Paper en Louisiana como ingeniera de procesos en el Departamento de Pulpa. Su desempeño fue tal que la compañía dejó sus puertas abiertas y regresó en el 2021, esta vez como parte del departamento de papel.
Su tercer Co-Op fue con GE Aviation, en Arkansas City, Kansas. Aquí tuvo la oportunidad de trabajar con la fabricación de la cadena de suministro de un Helicóptero Militar T-5OO y un avión comercial CF34-8. Al igual que con su primer Co-Op, las puertas quedaron abiertas y en verano 2022 irá a Ohio a tomar su segunda oportunidad con GE.
“Cuando entré jamás me hubiese imaginado las oportunidades que la UPR me iba a dar. Si no estuviera aquí no iba a tener la oportunidad de viajar y aprender tanto, todo lo que soy es gracias a la educación gratuita y accesible”, expresó la alumna del colegio.
Culminando la entrevista, Laura Ysabel mencionó, con voz quebrantada, que su mayor inspiración es su familia, en especial, su abuela Molly quien fue la única de sus siete hermanos que logró estudiar y convertirse en maestra. “Mi familia es mi roca y mi pilar. Abuela me enseñó a leer y estudiar y mami ha corrido conmigo siempre y me ha ayudado a creer en mí”, resaltó la ingeniera mecánica en formación.
Sin su familia y la educación pública y accesible, Laura Ysabel Cruz Arroyo no sería la persona que es ahora.