En celebración del Día Internacional de la Visibilidad Trans el pasado miércoles, 31 de marzo, se reconocieron las aportaciones de las personas transgénero y la necesidad de hacerles más visibles en sectores de la sociedad: desde la política pública y los sistemas educativos hasta los medios de comunicación.
Poder, revolución, transformación y libertad son algunas de las palabras que utilizaron las personas entrevistadas de la comunidad LGBTQIA+ para definir lo que significa ser trans.
Ser trans es poder
“La realidad es que en Puerto Rico la visibilidad trans es casi inexistente a excepción de cuando nos asesinan. Creo que fuera de esos casos en los que tenemos que alzar nuestra voz debido a las injusticias que se cometen en contra de nuestros cuerpos, no hay mucha visibilidad”, expresó Natasha Alor Rosa, también conocida como la drag queen Tacha Rola.
Tacha es mesera en Loverbar, un “queer club” en Río Piedras, y considera que este es uno de los pocos lugares en donde se siente visibilizada y respetada.
“Puedo trabajar sin tener que esconder mi identidad, sin tener miedo a ser violentada […] Me sentí visibilizada al estar en un lugar en donde se me respeta, donde se entiende mi identidad”, mencionó la performer.
A pesar de que le encanta trabajar en Loverbar, Tacha es comunicadora egresada de la Universidad del Sagrado Corazón y quiere, en algún momento, dedicarse a las comunicaciones profesionalmente, pero siente que no hay oportunidades en los medios para las personas trans.
Les activistas trans Samal, Ínaru y Luis José coincidieron con el pensamiento de Tacha en cuanto a la poca visibilidad que sienten hacia elles en la Isla.
Según Alor Rosa, la solución a la falta de visibilidad es la educación con perspectiva de género y más oportunidades de empleo para todes, no solo para las personas cisgénero, es decir, quienes se identifican con el género que fueron asignados al nacer.
La educación con perspectiva de género es un término que se refiere a la búsqueda de la equidad entre los distintos géneros a través de la educación para terminar con el machismo y la opresión hacia personas con identidades que no encajan con el binario hombre-mujer.
Además de la educación, “lo más importante es empezar a generar oportunidades en las que podamos competir equitativamente con las personas sin que nuestra identidad o expresión de género sea un factor decisivo en si se nos da la oportunidad o no”, planteó la artista.
Para ella, ser trans significa poder porque “es tomar autonomía de tu cuerpo y no permitir que la sociedad dicte lo que tú tienes que ser simplemente porque está establecido en algún código social”, expresó.
Ser trans es revolución
Samal (elle/ella) es activista de la comunidad transgénero e integrante del colectivo La Sombrilla Cuir, proyecto que busca educar a la comunidad sobre las personas queer a través de talleres y contenido en las redes sociales.
Por su parte, Samal hizo un bachillerato en Ciencias Sociales con concentración en Psicología en la Universidad de Puerto Rico (UPR) Recinto de Río Piedras y actualmente cursa su maestría en Consejería Psicológica en la Universidad Carlos Albizu.
Uno de los retos que enfrentan las personas trans en Puerto Rico es el buscar y recibir servicios de apoyo, en especial de salud, por lo que la educación y la capacitación a profesionales de salud es una de las formas de lograr que este apoyo sea accesible y de calidad.
Según el Centro Nacional para la Igualdad Tránsgénero, en Puerto Rico hay una comunidad trans de casi 30 mil personas, pero solo hay dos clínicas especializadas que brindan servicios médicos a este colectivo.
“Yo estoy estudiando consejería psicológica porque la salud mental para las personas trans en Puerto Rico es horrible. Tengo muchas personas cercanas que buscan salud mental, buscan personas que den terapias psicológicas, pero para nosotres casi no hay”, destacó Samal.
Además de la educación y las oportunidades de trabajo, Samal considera que uno de los mayores retos que enfrenta la comunidad trans es la representación de elles en los medios.
“Más allá de la aceptación, más allá de la tolerancia, más allá de la educación, también hay una presión para que parezcamos personas cisgénero (en los medios), para ser aceptades y para tener oportunidades de trabajo”, aseguró.
Para elle, ser trans significa revolución porque “a pesar de que siempre hemos resistido, (ser trans) es algo que siempre se ha invisibilizado, a través de la historia se ha callado. Nuestra propia existencia es una revolución”, señaló.
Ser trans es transformación
Ínaru Nadia De la Fuente Diaz (elle/ella), activista e integrante de La Sombrilla Cuir, se identifica como una persona no binaria femenina.
Desde joven, sus compañeros de clase le hacían bullying por ser diferente e incluso, en una ocasión, la trabajadora social de su escuela trató de convertirla en heterosexual.
“Fue casi como una terapia de conversión”, recordó Ínaru Nadia, quien es también estudiante de Derecho en la UPR Recinto de Río Piedras.
En días recientes, ha resurgido el debate en torno a la prohibición de las llamadas “terapias de conversión”, que buscan cambiar la identidad de género y orientación sexual en menores para imponerles un régimen heteronormativo, en el que solo las relaciones sexuales-afectivas heterosexuales y las identidades binarias son aceptadas y representadas desde las instituciones sociales.
El Proyecto del Senado 184 busca proteger a los menores mediante la prohibición de estas prácticas que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha descrito como inefectivas y catalogado de tortura.
El proyecto ha tenido oposición liderada, mayormente, por el sector conservador, fundamentalista, y con portavoces del partido Proyecto Dignidad como Joanne Rodríguez Veve del Senado y Lisie Burgos de la Cámara de Representantes.
La implementación del Proyecto del Senado 184 “sería una nueva herramienta para nosotres, para hacerle frente al fundamentalismo que hay en Puerto Rico y que tanto nos ha intentado callar, reprimir, y, sutilmente, violentar”, aseguró Ínaru Nadia.
Al igual que Samal, Ínaru opinó que hay una falta de representación de personas trans en los medios.
“Sí hay algún tipo de representación en los medios en inglés, pero en español yo no me siento representade. Me siento ridiculizade por completo[…]eso lo que hace es que las personas no me tomen en serio cuando me vean por ahí y se burlen de mí”, destacó Ínaru Nadia.
La estudiante de Derecho mencionó que la visibilidad en los medios es importante para el empoderamiento de las personas trans.
“Nosotres también podemos ser el personaje empoderade en la televisión, la mujer trans también puede ser la heroína de la historia, ella puede ser la mujer fuerte…”, aseguró.
Para Ínaru Nadia, ser trans significa transformación.
“Yo siento que no importa la identidad que sea dentro de la diversidad de género o sexo, transformamos la sociedad de una manera u otra […] no importa lo que hagamos, siempre que alguien nos vea, transformamos la vida de esa persona”, añadió Ínaru Nadia.
Ser trans es libertad
Otro reto al que se enfrentan las personas trans es la inaccesibilidad de recursos básicos, muchas veces limitados por la ubicación geográfica de su vivienda.
“En Puerto Rico existe algo que es el “metrocentrismo” algo que hace que los recursos se amontonen en el área metro y que abandonen otras áreas de la Isla”, mencionó Luis José Morales Ortiz (él/ elle/ ella), mayagüezano, activista y artista plástico.
En Puerto Rico, las únicas dos clínicas que ofrecen servicios especializados de medicina primaria, terapia hormonal, psicología y trabajo social para la comunidad trans están ubicadas en San Juan, reveló un reportaje de El Vocero.
Morales Ortiz agregó que, por la inaccesibilidad de recursos en sus pueblos, las personas trans ubicadas alrededor de la Isla se topan con un choque cultural al viajar al área metropolitana para obtener los servicios.
“Soy de Comerio, así que hubo un choque cuando llegue a la ciudad y vi todos estos referentes que nunca había tenido. No me había rodeado de hombres homosexuales, ni de personas LGBTQ+…”, coincidió Ínaru Nadia respecto a las expresiones de Luis José.
Al igual que les demás entrevistades, Luis José, también conocido como la artista Lupe Martell, dijo que la única forma de que la comunidad LGBTQI+ sea visibilizade en Puerto Rico es a través de la educación con perspectiva de género no solo en las escuelas, sino que también en las instituciones médicas.
“Sí desde pequeñe se comienza a inculcar un currículo con perspectiva de género en las escuelas públicas del país, la tasa de feminicidios va a ir bajando, las personas trans van a ser respetados, van a tener recursos, van a lograr que les validen, van a poder conseguir empleo…”, aseguró el fundador del colectivo educativo Por la Perspectiva de Género y Haus of Martell.
Un consejo para les que se identifican bajo la sombrilla trans es que “no están soles, que hay muchas personas que estamos pendientes, estamos buscándoles para ayudarles y darles el ‘support’ necesario”, expresó Luis José.
La palabra libertad representa ser trans para Luis José.
“Quien yo soy es constantemente esta lucha por ser libre, por ser quien yo soy, por poder expresarme como yo quiero, por poder vestirme como yo quiero, por poder hablar como yo quiero sin ser juzgade. Por eso es que, para mí, ser cuir, es ser libre ‘no matter what»’, afirmó el activista.