El Junte Juvenil Comunitario de San Juan denunció el pasado viernes que la “inacción gubernamental” durante la pandemia por el nuevo coronavirus (COVID-19) afecta, principalmente, a las personas de escasos recursos.
El colectivo de adolescentes residentes de barrios y residenciales públicos de San Juan realizó un encuentro virtual para discutir el manejo de la pandemia de COVID-19 por el gobierno y cómo esto ha afectado su realidad familiar y comunitaria.
“La juventud de barrios y caseríos de San Juan está cansada de la inacción gubernamental”, expresó el grupo a través de un comunicado.
El Junte Juvenil está compuesto por cerca de 80 jóvenes de las siguientes barriadas y residenciales públicos: Barrio Obrero, Barrio Obrero Marina, Barrio Obrero San Ciprián, Buena Vista Santurce, Las Monjas, Bitumul e Israel, Buena Vista Hato Rey, Parada 27, Venezuela, Capetillo, Blondet, García Ubarri, Mora, Buen Consejo y Residencial Luis Lloréns Torres en San Juan.
Jessica Portes, vecina en la comunidad de Buen Consejo en Río Piedras, dijo que hay personas que están pasando hambre porque los cupones no son suficiente. Además, aseguró que hay personas que no están trabajando porque el sistema de desempleo no les ha contestado.
El grupo, constituido en marzo del 2018, es solo una de varias organizaciones que se han preocupado por el hambre que están pasando las personas con necesidad económica en el país durante la pandemia.
Sin embargo, no fue hasta que un juez del Tribunal de San Juan acogió una demanda presentada por familias y organizaciones sin fines de lucro, que el gobierno central y alcaldes acordaron crear un sistema de distribución de alimentos en coordinación con el Departamento de Educación. Aún así, según información publicada por El Nuevo Día, el acuerdo no implica la apertura de todos los comedores escolares.
El grupo de jóvenes propuso, en la misiva, que el gobierno abra todos los comedores escolares para que las personas que necesiten comida caliente tengan acceso a ese recurso del Estado.
Además, expresaron preocupación por la manera en la que se está manejando la pandemia en Puerto Rico ya que, aseguraron, la gente más pobre es quien sufre las consecuencias.
En Puerto Rico, 50% o más de la población en 36 municipios vive bajo el nivel de pobreza, según estadísticas en el Censo del 2019.
Por su parte, Michael Rivera, integrante de la comunidad de Capetillo, resaltó la problemática de que en muchos de los barrios hay inmigrantes indocumentados. El joven expresó que muchas de estas personas han estado dependiendo de la ayuda de sus vecinos para sobrevivir.
Otro de los señalamientos del Junte Juvenil es que muchos estudiantes del sistema público del país no poseen los recursos tecnológicos en sus hogares para poder cumplir con todas sus tareas.
“Debemos admitir que tener una computadora, una impresora y acceso al internet son privilegios para unos pocos. Existen jóvenes que han tenido que recurrir a trabajadores sociales comunitarios para poder imprimir los módulos y las tareas”, dijo Krystal Géigel Ramírez, residente y líder comunitaria de Buena Vista Santurce.
Además, Géigel Ramírez explicó que muchos estudiantes se han enfrentado con la realidad de tener que realizar sus tareas y tomar clases y exámenes sin el apoyo de los adultos a su alrededor ya que algunos no tienen las herramientas académicas para apoyarles.
Por tal razón, el Junte Juvenil pidió que el Departamento de Educación ofrezca adiestramientos organizados para preparar a los maestros sobre educación a distancia, provea de los materiales necesarios a aquellos estudiantes que no cuenten con las herramientas en sus hogares, y sea más empático con la realidad de pobreza que hay en el país.
El joven Edwin Johnson, del Residencial Luis Lloréns Torres reiteró que el grupo no está conforme con la respuesta del gobierno ante la pandemia.
“No hay un rastreo de los pacientes enfermos, no se está manejando el sistema de desempleo adecuadamente, no acaban de llegar los incentivos, no se no se están realizando las pruebas de forma efectiva y todo esto ha aumentado los patrones de violencia en los hogares”, añadió.
Johnson expresó que el grupo está cansado de la “inacción y mediocridad” de parte del gobierno.
“No pudieron manejar los desastres anteriores con efectividad y este tampoco”, puntualizó el joven.
Organización de base comunitaria
El colectivo, que se reúne regularmente para analizar, reflexionar y presentar propuestas sobre problemáticas sociales que afectan a los grupos vulnerables del país, estableció que las comunidades organizadas son importantes para ayudar a las sociedades a subsistir.
“Estar encerrados en casa nos ha mostrado las ineficiencias del sistema. Nuevamente las organizaciones de base comunitaria han dado la cara por el país, pero es momento de que los políticos respondan a nuestras exigencias. Al pueblo lo está matando la indiferencia e ineficiencia de los políticos”, expresó Géigel Ramírez.
El colectivo exhortó a que las personas se queden en su casa, la mayor cantidad de tiempo posible, pero estableció que el gobierno “tiene que hacer su parte”.
“En las emergencias como los huracanes Irma y María, terremotos en el sur y ahora en la pandemia, vemos como las comunidades que se organizan se apoyan entre ellas.”, establece la misiva. “El pueblo hace su parte, pero el Gobierno tiene que hacer lo que le corresponde”.
AMRC