Por: Allison N. Martínez Martínez / Twitter: @allinicole_15
«El derecho a la emigración debería ser un proceso realizado por personas de todas las nacionalidades en donde se pueda compartir información y exista la educación continua entre las diversidades, pero, ahora mismo, nada es así», manifestó la Prof. Sheila Vélez Martínez en su conversatorio, en la Escuela de Derecho —respecto a las órdenes ejecutivas migratorias que ha emitido el presidente Donald Trump.
Actualmente, existen sobre 11 millones de indocumentados, que el presidente pretende identificar y deportar.
Como medida, Trump eliminó las prioridades de deportación establecidas por Obama. Esta orden implica que todos los indocumentados serán deportados, independientemente de si han cometido crímenes graves o no.
«Esto quiere decir que no hay diferencia entre el asesino en serie y el jardinero que le corta la grama a su mamá, para efectos de prioridades de deportación», expresó Vélez Martínez.
Por otro lado, oficiales locales podrán adquirir una certificación mediante acuerdos para convertirse en agentes de migración. También, se expandió el Programa de Deportación de Criminales sin realizar una vista por sus actos. Asimismo, en los estados del Sur, aumentarán la cantidad de agentes.
Además, Trump afirma la construcción de una barrera física e impenetrable entre México y los Estados Unidos, según destaca en la orden. El espacio del ganado y la apropiación de territorios de los Nativos Americanos, son algunas de las situaciones que surgirán si se realiza este proyecto.
La creación de centros de detención en la frontera, también esta pendiente junto con la elaboración de la pared.
Por último, Trump presenta el Muslim Ban, la orden que prohíbe la entrada de inmigrantes de Iraq, Iran Libya, Somalia, Sudan, Syria y Yemen.
La base de esta orden es proteger a la nación de posibles ataques terroristas, por lo que Veléz Martínez destaca que, desde el 1975, no han surgido atentados de ninguno de estos países.
Como consecuencia, proyectos como Deferred Action for Childhood Arrivals (DACA), que promueven la estadía de los jóvenes inmigrantes, pueden desaparecer.
Posteriormente, la orden fue enmendada para excluir a Iraq de la lista y eliminar la alusión a la religión musulmana.
Los inmigrantes con visa de los países mencionados, también son excluidos de la orden.
La profesora concluyó el conversatorio exhortando a los universitarios a reafirmar sus valores de diversidad e inclusión, dentro y fuera de las instituciones educativas. Instó a la población a crear proyectos comunitarios que promuevan la educación y protección de los inmigrantes afectados por la orden.