El Hospital Universitario de Adultos del Centro Médico de Río Piedras sufrió una avería en la línea principal, el pasado domingo, que dejó a la institución sin servicio eléctrico desde las 2:00 p.m. hasta el lunes a las 9:00 a.m.
La institución del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) operó, durante 20 horas aproximadamente, con bajo voltaje y sin aire acondicionado. Asimismo, se afectó la iluminación en algunos pasillos, más la operación de algunos equipos no vitales.
El Hospital tuvo que cancelar las cirugías electivas y las citas a clínicas programadas para el pasado lunes. Incluso, algunos pacientes fueron dados de alta.
“Esto (el apagón) es inaudito. Aquí no ha pasado ni una depresión tropical […] ¿Qué más evidencia necesitan para aceptar que nuestro Sistema de Salud colapsó? ¿Qué esperan? ¿Que se mueran los puertorriqueñxs?”, denunció, el pasado domingo, el médico internista Hiram Rodríguez Torres a través de Instagram.
Por un lado, la directora de Servicios de Enfermería, Ada Reyes Larregui, exhortó a mantener la tranquilidad debido a que no se interrumpió “ningún tratamiento”.
Asimismo, aseguró que hubo comunicación con los pacientes de diálisis citados en la mañana del lunes para reprogramarlos a la tarde de ese mismo día.
Reyes Larregui apuntó que los equipos de soporte vital, como ventiladores, máquinas de succión y las que llevan medicamento, tenían batería cuando fallaron los generadores. Según la directora, hay 72 ventiladores disponibles para cualquier imprevisto.
“No representó (la falta de servicio eléctrico) ningún riesgo para el paciente”, explicó Reyes Larregui al periódico El Nuevo Día.
Por otro lado, el secretario del Departamento de Salud, Carlos Mellado López, expresó, el domingo en la noche, que los planes de contingencia fueron activados inmediatamente. “Afortunadamente, ningún paciente ha estado en riesgo y los equipos continúan trabajando con batería”, comentó.
Según el director de Ambiente de Cuidados de Administración de Servicios Médicos de Puerto Rico (ASEM), Wilfredo Martínez, se identificó una pieza de protección que se vio afectada e impidió que el generador encendiera.
“En una ocasión, hubo una interrupción y los generadores encendieron […] A las 3:30 p.m., hubo otra interrupción. En esta ocasión, los generadores no encendieron.”, sostuvo el director en llamada con El Nuevo Día.
Martínez reconoció que ese percance atrasó la reparación de la línea principal.
Según el portavoz de LUMA Energy, Hugo Sorrentini, las brigadas estaban listas para hacer las reparaciones pero esperaban que el hospital realizara unas “labores críticas internas” antes de comenzar.
Sin embargo, el sistema fue restablecido en el Hospital Universitario luego de más de 16 horas.
Aunque el hospital siguió el protocolo, “pacientes y empleados del hospital expresaron disgusto y preocupación por el apagón”, reportó Primera Hora.
Atribuyen muerte de un paciente a la falta de energía eléctrica
El padre de un paciente del Hospital Universitario atribuyó la muerte de su hijo, recién operado por una aneurisma, a la falta de servicio eléctrico en la institución el pasado domingo.
Osvaldo Sánchez, padre del paciente, denunció la muerte de su hijo Osvaldo Sánchez Medina en una entrevista con Wapa TV.
Asimismo, declaró que, mientras su hijo estuvo ingresado en el hospital, le negaron información y solo le indicaron que estaba estable.
Por su parte, el secretario del Departamento de Salud aseguró que la muerte del paciente no fue consecuencia de la situación con el servicio eléctrico.
“La unidad donde se encontraba […] tenía electricidad y contaba con todo el personal médico y necesario para atender cualquier situación como la que ocurrió. Las unidades de intensivo y neurología atendieron la respuesta de acuerdo a la condición del paciente que estuvo bien delicado desde su ingreso”, lamentó el secretario Mellado López.