Con el proyecto artístico Mess Up Mind, Carylee Tripari, una joven ponceña de 22 años, ha captado la atención de muchos a través de las redes sociales por sus pinturas, las cuales vende para ahorrar dinero y poder cubrir sus estudios graduados.
Las obras de arte de Tripari se reconocieron cuando publicó la pintura de un perro que ahora reside en su lugar de trabajo, donde ejerce como técnica de veterinaria.
La idea de este proyecto vino tras la joven irse de su casa de crianza y enfrentar situaciones económicas. Sus amigos le sugirieron vender sus obras ya que, usualmente, las creaba y regalaba a personas cercanas.
“Cuando me fui de mi casa, me vino una situación económica que llegó al punto de que se me atrasa la renta y todo lo demás y el problema era que el costo más grande estaba por venir… la escuela graduada”, explicó la estudiante en entrevista con Pulso Estudiantil.
Además, Tripari utiliza la pintura como método de terapia al haber sido diagnosticada con ansiedad, depresión y trastorno explosivo intermitente (TEI).
“Cada vez que me daban episodios de cada uno de ellos, pues lo que hacía era pintar y dibujar lo que yo tenía en la mente y eso eran cosas bien random”, agregó la estudiante.
Actualmente, cursa su último año de bachillerato en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico Recinto de Ponce, y es atleta de halterofilia y judo. Su bachillerato se destaca en Biomédica y aspira a continuar sus estudios en veterinaria en alguna universidad fuera del país como Australia o Estados Unidos.
La joven artista acepta pedidos personalizados a través de sus páginas de Facebook o Instagram con opciones de entrega.