El Consejo General de Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Ciencias Médicas (CGE-RCM) aprobó ayer, 14 de abril, una moción para retirarle la confianza y solicitarle la renuncia al rector actual, Segundo Rodríguez Quilichini, actual miembro y coordinador general del task force médico de la gobernadora.
La moción, aprobada por mayoría en reunión ordinaria, se justificó por los recientes señalamientos de la exsecretaria auxiliar en Administración del Departamento de Salud, Adil Rosa, quien aseguró que el task force médico estuvo envuelto en una compra fraudulenta de pruebas rápidas para COVID-19.
«Solicitando la renuncia a Rectoría del Dr. Segundo Rodríguez Quilichini […] poniendo en juego la salud del país. Y, a su vez, por haber afectado la imagen y prestigio del Recinto de Ciencias Médicas», certificó por escrito la secretaria ejecutiva del CGE-RCM, Bárbara M. de Llovio del Río.
Los señalamientos oficiales del recinto surgieron ante las interacciones del coordinador Rodríguez Quilichini, por medio de unos mensajes de texto filtrados, en los que Juan Maldonado, representante de una compañía de construcción pequeña llamada Apex General Contractors, le ofreció las pruebas rápidas de COVID-19 que nunca llegaron a la isla.
El doctor afirma haber referido Apex al Departamento de Salud al mostrarle los mensajes del licenciado Maldonado. Sin embargo, niega que haya ocurrido algún tipo de actividad irregular y tener conexión alguna con Apex o el Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres, agencia que otorgó un contrato de $38 millones a Apex, y le pagó la mitad por adelantado.
El referido ha sido escudriñado dado que Apex no tenía ningún tipo de experiencia manejando equipo médico, y mucho menos durante una emergencia.
De pruebas rápidas de COVID-19. El Recinto de Ciencias Médicas ha trabajado arduamente para mantener un alto prestigio en la formación de profesionales de la salud, el cuál se ha visto afectado con los señalamientos al actual Rector.
— CGE RCM (@CGERCM) April 15, 2020
El desempeño del rector se cuestionó aún más luego de que la exsecretaria Adil Rosa declarara ayer, durante una vista ejecutiva de la Comisión de Salud de la Cámara de Representantes, que Rodríguez Quilichini rechazó una oferta para comprar medio millón de pruebas rápidas para COVID-19 de la empresa Globex Intertrade por $5 millones.
Actualmente, el Departamento de Justicia de Puerto Rico, el FBI, y la Cámara de Representantes de Puerto Rico están investigando la compra fraudulenta que, eventualmente, fue cancelada al no tener el aval del gobierno federal ni haber llegado antes del 1 de abril como había sido acordado.
Asociación de profesores se une al reclamo
Por otro lado, la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios, capítulo del Recinto de Ciencias Médicas (APPU-RCM), exigió la renuncia del doctor Rodríguez Quilichini a través de un comunicado de prensa divulgado ayer, 14 de abril.
La asociación sostuvo que los lazos que el doctor tiene con su asesor de confianza, Eduardo «Tito» Laureano, levantan cuestionamientos serios en cuanto a su involucramiento con la compra fraudulenta.
“El Sr. Eduardo “Tito” Laureano, quien fuera ayudante especial del gobernador Pedro Rosselló en Asuntos Municipales, y está actualmente involucrado en la compra de pruebas para el COVID-19 de manera cuestionable, ha estado contratado por el Dr. Rodríguez Quilichini desde el 25 de agosto de 2017 como su asesor de confianza. No tenemos conocimiento del rol que desempeña el Sr. Eduardo “Tito” Laureano en el RCM, y mucho menos hemos recibido algún informe que evidencie el cumplimiento con las funciones para las cuales ha sido contratado”, leen las declaraciones de la APPU-RCM.
Laureano, quien proveyó al representante de Apex General Contractors el contacto del rector en el mensaje de texto originalmente filtrado, tiene lazos estrechos con el PNP. Por su parte, el doctor Rodríguez Quilichini ha sido donante de las campañas políticas de candidatos del PNP como Thomas Rivera Schatz.
La APPU-RCM pone en tela de juicio el desempeño del rector por sus dudosas alianzas, y añade que su trato hacia los docentes del Recinto de Ciencias Médicas refleja la misma falta de credibilidad que ha mostrado durante estos controvertibles sucesos.
“Las acciones del Rector han creado una seria crisis en el País. Por todo lo anterior, repudiamos contundentemente la conducta del Dr. Segundo Rodríguez Quilichini, y le exigimos la renuncia como Rector del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico. Exigimos que se cancelen los contratos de asesoría que se han otorgado a donantes políticos, en nuestro recinto, pagados con fondos públicos”, concluyeron.
Ayer, se confirmó que la empresa australiana Promedical que entregaría las pruebas rápidas a Apex General Contractors, nunca recibió contacto alguno con dicha empresa puertorriqueña.
«[…] si alguien tiene información adicional sobre esta situación o que demuestre la comisión de alguna actuación indebida, debe canalizarla con las autoridades pertinentes para que se investigue y se llegue hasta las últimas consecuencias», sostuvo Rodríguez Quilichini en una carta del task force Médico, publicada hace dos días.
GACP