Ante la cobertura mediática del asesinato de Neulisa Luciano Ruiz, mejor conocida como Alexa, es necesario señalar la violencia que se perpetúa contra las personas trans al utilizar lenguaje discriminatorio en los medios.
Las personas trans son dignas de coberturas humanizantes, sensibles, y justas. Evitemos la transfobia hacia ellas y, en su lugar, promovamos cubrir sus historias de manera correcta.
Pulso Estudiantil ha recopilado una guía para ayudar a los periodistas en formación o comunicadores al informar sobre las personas trans respetuosamente.
Respeta la identidad de género de la persona en cuestión
El periodista debe preguntar a la persona con cuáles pronombres se identifica. De no ser posible, es ideal observar la forma que la persona se describe. Es decir, si utiliza adjetivos femeninos cuando habla de sí misma, es muy probable que se identifique como mujer.
Cuando es imposible o difícil conocer la identidad de género de quién se reporta, lo recomendado es utilizar lenguaje neutral que no indique género.
‘’Si usted no se sabe el género de la persona, investígalo. Si no se sabe el género de la persona, pongan persona en lugar de colocar una palabra que adjudique género’’, aconsejó Ínaru de la Fuente, integrante de la colectiva educativa La Sombrilla Cuir.
Además, siempre debe utilizarse el nombre con el que la persona trans se identifica. Se considera degradante mencionar el nombre que sus padres le asignaron al nacer.
Aunque sea el nombre que aparece en sus documentos legales, se considera una falta de respeto identificarlas de esta forma. Muchas personas trans no tienen los recursos para cambiar sus nombres legalmente.
La investigación es clave
La cobertura noticiosa de las personas trans amerita la misma minuciosidad que se emplea para otros reportajes.
Si un periodista desconoce cómo cubrir asuntos que conciernen a una persona trans, debe emplear el tiempo necesario para consultar con los profesionales y organizaciones pertinentes. Estos deben tener conocimiento vasto acerca del tema y, además, mostrar sensibilidad y empatía hacia población de gente trans.
‘’Un/a reporter/a debe contar con tiempo para consultar, mediante lectura y llamadas telefónicas, las organizaciones que atienden profesionalmente las necesidades de las personas trans. Cada caso es distinto, y ese profesional orientará al/a reporter/a acerca de cómo mejor referirse a la persona trans en su contexto’’, compartió Héctor Aponte Alequín, director asociado interino de la Escuela de Comunicaciones de la Universidad de Puerto Rico Recinto de Río Piedras.
No se debe tomar como oficial la palabra de las autoridades o de fuentes extraoficiales por sentado al reportar de gente trans; a menudo estas no saben identificarlas, y proveen descripciones transfóbicas o poco confiables.
Por otro lado, las juntas editoriales son indispensables en el proceso de investigación. Aponte Alequín indicó que ‘’los editores y juntas editoriales tienen una responsabilidad ineludible, desde la cantidad de trabajo que colocan sobre las/los reporteras/os hasta la lectura de aprobación que deben realizar antes de publicar. Un/a buen/a editor/a tiene que asegurarse de distribuir adecuadamente el tiempo de su equipo y considerar la necesidad de preparación para reportar temas de los que el público podría encontrarse desinformado’’.
Evitar el sensacionalismo
Al informar sobre este tema, hay que tener claro que sus historias se han usado para crear sensacionalismo porque convirtieron sus cuerpos en objetos de morbo. El sensacionalismo puede llegar a deshumanizar a las personas trans y arrebatarles su dignidad.
‘’No podemos caer en la trampa de la nota y el video viral. Compartir un video con una advertencia sobre que ‘puede herir sensibilidades’ es hacer un periodismo irresponsable y sensacionalista que no respeta la dignidad de las personas’’, exhortó Amary Santiago Torres, periodista y profesora que dirige el medio de periodismo feminista Todas.
Asimismo, deben evitar publicar fotos morbosas del cuerpo de la persona en cuestión. Estas solo sirven para mantener la violencia viva en el discurso público, o sino, para propiciar ataques por parte de las personas que discriminan.
Se transforma el luto de muchas personas en la imagen de un cadáver que, en muchos casos, se le continúa identificando el género incorrectamente.
‘’No se puede buscar la nota que genere controversias, sino que debemos apostar por la nota humana, la historia que eduque y muestre la diversidad social. Es esencial tomar lo anterior en consideración, porque desde los medios se construye, se educa y se crea opinión pública’’, puntualizó Santiago Torres acerca de la importancia de los medios en educar al pueblo a través del periodismo ético.
Reportar la noticia
Otro error que los medios cometen es incluir voces en oposición a la existencia de las personas trans bajo la justificación de crear una nota ‘’balanceada’’. La existencia de una persona es válida, y merece ser respetada..
‘’Debemos evitar entrevistar a voces que abonen al odio, discrimen y prejuicios en nuestra sociedad. Resulta que, en busca de una nota balanceada con diferentes puntos de vista, se les da foro a figuras que desinforman. Tener voces encontradas no es sinónimo de un balance de puntos de vista’’, recalcó Santiago Torres.
Evitar estereotipos, clichés, y perfiles que plantean imágenes ofensivas y violentas
Las personas trans siempre han existido, y se deben evitar los estereotipos trillados que justifican la violencia que la sociedad ejerce contra ellas; estas forman parte de familias, contribuyen a la sociedad, y merecen una existencia digna.
No son ‘’depredadores sexuales’’, ni personas «deprevadas», o personas confundidas, exclusivamente traumadas, o psicológicamente heridas. Estos seres vienen de todas formas y maneras, y sus fallas o situaciones personales no son meramente a causa de su identidad de género.
Las personas trans no están «engañando» con su expresión de género, y tampoco se identifican tal cual a raíz de traumas psicológicos.
Evitar lenguaje inflamatorio y peyorativo
Hay palabras que contribuyen hacia el odio ya sea porque son palabras que degradan sus imágenes o les quitan validez
Dichos términos deberían eliminarse y reemplazarse por palabras apropiadas, ya que contribuyen a la violencia sistémica contra la gente trans.
Entre la lista de palabras que deberían evitarse como lenguaje empleado en los medios, De la Fuente detalló:
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Travesti o transvesti: se refería en el pasado a un diagnóstico por una parafilia, pero dicho término ya no se reconoce médicamente y es altamente peyorativo. Las personas trans no son trans por la forma que se visten, sino por la forma que se sienten, y tampoco es un fetiche sexual, es una identidad.
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Transformista: se refiere a las personas que practican el arte del ‘’drag’’ o transformismo, que tampoco es lo mismo que ser una persona trans. Para una persona trans, la ropa no determina su identidad. Para la transformista, su ropa es parte de una imagen construida artísticamente para representar a un personaje, usualmente.
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‘’Hombre vestido de mujer’’/ ‘’mujer vestido de hombre’’: ambas expresiones son altamente transfóbicas y no validan la identidad de las personas trans.
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Transexual: solo se aplica a personas que han realizado cirugía de afirmación de género. No todas las personas trans desean pasar por este procedimiento.
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‘’Hombre afeminado’’/ ‘’bucha’’: también, son palabras que desacreditan la experiencia trans.
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‘’Tranny’’: altamente peyorativa y ofensiva.
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Hermafrodita: se utiliza para ofender a las personas «intersex», y en ocasiones menos comunes, acerca de las personas trans por igual.
- «la transgénero» / «el transgénero»: nunca deben utilizarse como sustantivos. Siempre debe utilizarse «mujer trans», seguido por el nombre de la persona, por ejemplo.
En lugar de emplear estas palabras, nos referimos a las personas trans de acuerdo al género con el que se identifican. A continuación, una lista de términos aceptables. Se utilizan según la persona se identifica, lo cual es lo más importante:
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Hombre: se utiliza si no se desea resaltar si la persona es trans o no, pero definitivamente no se utiliza para denotar su género asignado al nacer. Si la persona se identifica como hombre, esta es como hombre u hombre trans, aunque el género que se le haya asignado al nacer sea otro.
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Mujer: se emplea si no se quiere resaltar si la persona es trans, pero definitivamente no se utiliza para denotar su género asignado al nacer. Si la persona se identifica como mujer, se le llama así o mujer trans, aunque el género que se le haya asignado al nacer sea otro.
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Hombre trans
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Mujer trans
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Persona trans: forma más segura e inclusiva de referirse a una persona trans.
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Persona de la experiencia trans
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Persona no binaria
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Persona: es el término más apto para cuando se desconoce el género de la persona en cuestión.
No asumir que una persona es abiertamente trans sin haberlo confirmado
Muchas personas trans suelen esconder sus identidades para evitar el odio del día a día. No viven abiertamente, y por lo tanto, la labor investigativa incluye corroborar si la persona es abiertamente trans o no.
No se puede asumir a base de lo observado, sino, se reporta con la información que se obtiene de la persona de primera mano.
Hay que tomar en cuenta la seguridad de la persona. Si hay razón para creer que hablar sobre la identidad de género de una persona peligra su seguridad, vida, dignidad, o salud, no se debería identificar a la persona como trans.
La forma más apropiada es observar cómo dicha persona se refiere a sí misma en público y su expresión de género. Sino, preguntar a la persona cómo se identifica de forma confidencial.
Reportar con sensibilidad, respeto, y dignidad
Los comunicadores tienen la responsabilidad de educar a los ciudadanos sobre los temas que conciernen la justicia y los derechos de las personas.
En la investigación, es importante contactarse con las organizaciones apropiadas que pueden educar a los ciudadanos y comunicadores acerca de estos temas. Incluso, es apropiado educarse por el deber de promover los derechos humanos.
En el caso del periodista, el derecho a la información le exige contribuir a una sociedad democrática con informes justos que respetan la dignidad humana.
A continuación, una lista de organizaciones y colectivas que informan o trabajan por y con las personas trans:
Estos recursos serán útiles para respetar los derechos de las personas trans, evitar publicaciones transfóbicas, y hacer periodismo ético que eduque al pueblo para proteger a las poblaciones más vulnerables.
ARAB