Por: Allison N. Martínez Martínez
Foto: Allison N. Martínez Martínez
El Comité de Presupuesto de la Junta Universitaria se reunió el pasado lunes para discutir posibles escenarios presupuestarios que podrían implicar la Matrícula Ajustada a los Ingresos (MAI); una reducción de la aportación gubernamental de $149 millones para el año fiscal 2017-18; y el uso del fondo de emergencias de la Universidad de Puerto Rico (UPR).
La directora de la Oficina de Presupuesto de Administración Central, Profa. Leticia Fernández, destacó que, a pesar de la situación que enfrenta la universidad, continuarán el proceso reglamentario de formación de presupuesto.
Asimismo, el pasado viernes, se enviaron las guías de presupuesto a los rectores, quienes tendrán hasta el 30 de mayo de 2017 para entregar los presupuestos de cada unidad.
Posteriormente, realizarán las vistas públicas; se lo presentarán a la Junta Universitaria para recomendaciones; y, luego, a la Junta de Gobierno, para su aprobación.
Por otro lado, no se ha publicado información oficial sobre cuál será la reducción de la aportación gubernamental a la UPR, ya que el presupuesto del gobierno aún no se ha divulgado. Sin embargo, la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP) informó a la institución que harán un presupuesto considerando una reducción en la aportación gubernamental de $149 millones, para el año fiscal 2017-18.
Por su parte, la Oficina de Presupuesto de Administración Central ha elaborado dos posibles escenarios presupuestarios, considerando la reducción mencionada:
1. Establecer una Matrícula Ajustada a los Ingresos (MAI). Esta medida propone que el pago de matrícula será proporcional a los ingresos que recibe el estudiantado. Esto supone que los estudiantes que tienen ingresos más bajos (45% del total del estudiantado) tendría un subsidio de 100% en el pago de matrícula. A mayor escala de ingresos, el pago de matrícula iría aumentando, hasta llegar a los estudiantes con ingresos más altos (aprox. 25%) —quienes tendrían que pagar el total de la matrícula. Además, utilizará 19 millones del fondo de emergencia de la UPR, para minimizar el impacto de los recortes.
2. No contempla la medida MAI, por lo que implica un recorte que ascendería a $144 millones. La diferencia de 5 millones, respecto a los 149 millones, proviene de otros ingresos que llegarán a la UPR por concepto del pago de marbetes y otras medidas que está aprobando la legislatura. En este caso, se utilizará 34 millones del fondo de emergencia de la UPR.
Ambos panoramas contemplan una reducción de $16 millones por concepto del pago de la deuda al Banco Gubernamental de Fomento (BGF). Aunque la Oficina de Presupuesto está dialogando con el BGF para no pagar y que dicha cantidad sea tomada del fondo de $91 millones que el BGF le ha retenido a la UPR.
En el renglón de Ajustes de Nóminas la Oficina de Presupuesto contempla:
a) Una reducción de 50% de plazas vacantes docentes y no docentes.
b) La eliminación del bono especial no recurrente.
c) Una reducción en la aportación patronal al plan médico ($612 mensual).
d) Una reducción en gastos de viaje.
e) Un ajuste al bono de navidad ($600).
Además, el presupuesto contempla ajustes sistémicos y otros que son discrecionales por cada unidad.
Entre las medidas de ajustes sistémico están: bono espacial, aportación a plan médico y bono de navidad.
En cuanto a los ajustes por unidad, se incluye: reducción de puestos vacantes, reducción de puestos temporeros, reducción de puestos de confianza, reestructuración académica y administrativa, revisión de descargas de tareas administrativas, reserva de energía eléctrica, presupuesto para materiales, contratos de servicios profesionales y gastos de viajes.
No obstante, un representante estudiantil presentó una moción para que, en el presupuesto de 2017-18, no se considere un aumento de matrícula o la matrícula ajustada al ingreso. La moción quedó en suspenso, porque analizarán y ponderarán la información recibida.