Por: Ana Teresa Solá Riviere / CMRC
La Coalición 8 de marzo, un ente formado de diversas organizaciones sociales, inauguró el pasado 20 de mayo una Alacena Feminista en la avenida Ponce de León para facilitar la donación durante la crisis de salud pública causada por el COVID-19.
Con su lema: “Dona lo que puedas, llévate lo que necesites”, el colectivo invita a la donación de alimentos y otros productos de primera necesidad para remediar efectos secundarios ocasionados durante la pandemia.
La alacena de suministros está localizada en el Edificio 1310 de la avenida Ponce de León (frente a Domino’s Pizza, al lado de Plaza Gran Victoria Elderly) y cuenta con la ayuda de voluntarios y compañeros de organizaciones primordialmente feministas.
La Coalición es una conglomeración de organizaciones, como Aborto Libre y Taller Salud, de distintos tipos de feminismos y pensares que se unen para hacer trabajo comunitario en nombre de la coalición.
Donantes entregan mayormente productos no perecederos, como comidas enlatadas, agua y cereales. La Coalición recibe llamadas de gente preguntando si pueden traer ropa con intención de traer de todo, pero quieren recalcar que el foco es pensar de los tipos de productos que uno encontraría comúnmente en la alacena de una casa.
Sin embargo, la coalición comunitaria impulsa la donación de otros productos de primera necesidad, como aquellos que aseguran la salubridad sexual y menstrual.
“Estamos abiertos a recibir de todo, pero es importante que la comida y la salud sean los focos principales de la alacena,” aseguró la voluntaria Katia Cruz Quintana.
No hay miembros turnando vigilancia de la alacena porque la idea es que corra por sí solo impulsado por la colectividad comunitaria. Confían en que personas de la comunidad se lleven lo que realmente necesiten y si pueden, dejar para los demás.
Siguen protocolos de salubridad en la alacena feminista; todas llevan guantes, mascarillas y desinfectantes cuando llegan al local. De hecho, están creando infografías o panfletos para concientizar el uso saludable de la alacena.
Ya instalaron círculos en el piso del espacio para asegurar que la gente mantenga la distancia de seis pies, pero seguirán implementando reglas básicas o sugerencias para que corra lo más saludablemente posible. Todo voluntario que pase por el espacio tiene la responsabilidad de velar por su salud y desinfectar sus productos donados.
Debido a que otros proyectos están transportando productos a hogares necesitados, la Coalición entiende que la iniciativa comunitaria sirve mejor como una extensión o complemento a estos servicios. Ellas seguirán abasteciendo la alacena, pero la idea es que se convierta en una dinámica comunitaria corrida por las mismas personas y que otros implementen la idea en sus propias comunidades para crear sus propios espacios comunes.
La voluntaria Cruz Quintana explicó que la lógica es pensar en colectivo y crear una dinámica circular donde la gente se sienta cómoda en tomar lo que necesite y el que puede, dar de lo que le sobra. No conlleva ningún tipo de monitoreo o vigilancia sobre quién entra y sale, sino impulsar la confianza en el pensamiento colectivo.
“Tristemente nos hemos enterado de que la gente se han llevado los mismos anaqueles y dejando todo completamente vacío, pero eso solo apunta a la existencia de otras pandemias que no se están señalando: la del hambre, la del desempleo y la violencia machista,” añadió Cruz Quintana.
Aún no hay convocatoria, pero si le interesa ser parte, puede acudir a la página de Facebook Coalición 8 de marzo, es bienvenido todo el que se quiera unir al esfuerzo comunitario.