Por: Víctor Torres Montalvo / Twitter: @motinsitepegas
Foto: Archivo/Pulso Estudiantil
La presidenta del Consejo General de Estudiantes (CGE) del Recinto de Río Piedras, Wilmarí De Jesús Álvarez, fue emplazada a que detenga sus acciones porque estas son una «interferencia culposa» con el contrato que todo estudiante tiene con la Universidad de Puerto Rico (UPR).
Los señalamientos se dan en una carta que Juan Arce, estudiante de la Escuela de Derecho, envió a De Jesús Álvarez en la noche de ayer en la cual especificó las obstrucciones contractuales que la presidenta estaba incurriendo.
«Me pongo en comunicación con usted para informarla sobre una interferencia culposa con mi contrato con la Universidad de Puerto Rico y para que cese y desista de dicha interferencia culposa», lee la primera oración de la misiva, que rápidamente señala la ilegitimidad del paro decretado el 28 de marzo, herramienta que comenzó con los 51 días de paralización que hasta ahora van en el campus.
Arce basó sus primeros argumentos en que ni la Ley de la Universidad de Puerto Rico, ni el Reglamento de Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, ni el Reglamento de Estudiantes del Recinto de Río Piedras (documento disponible más recientemente) le dan poder a la líder estudiantil para acoger y llevar a votación mociones de paro y/o huelga.
Sin embargo, «con conocimiento de que dicha moción, de aprobarse, afectaría sin duda alguna tanto directa como indirectamente a todos los estudiantes», se pasó a decidir en Asamblea General de Estudiantes, explicó el alumno.
El estudiante también acusó que está, continuamente, sufriendo daños económicos por tratar de volver a estudiar y «daños morales» por la supuesta continúa interferencia de la presidenta.
Asimismo, se citó al caso UPR v. Laborde (2010) el cual explica que «ningún grupo de estudiantes, oficial o no, sea una mayoría o una minoría, ni mucho menos un estudiante en su carácter individual, tienen el derecho de evitar que la universidad cumpla con su ofrecimiento académico e impedir que aquellos estudiantes que así lo deseen asistan a clase. No hay referéndum, asamblea ni votación –sea electrónica o por papeleta, ya sea abierta o secreta- que conceda el derecho a ningún estudiante o grupo de estudiantes para interferir con el derecho de tan siquiera uno de sus pares a recibir su enseñanza».
Mientras, avisó que no descarta demandar para resolver el asunto ni exigir que se le indemnice los gastos económicos que pueda tener en ese proceso.
Igualmente, Arce no descartó acudir a los tribunales con una demanda de clase, lo que significa que iría en representación de un grupo mayor de personas que tienen el mismo interés pero que se haría imposible llevarlas todas a los foros judiciales.
El pasado 10 de mayo, el Recinto de Río Piedras ratificó el voto de huelga que nueve de los once recintos decretaron en Asamblea Nacional Estudiantil, el pasado 5 de abril.
No obstante, actualmente solo Río Piedras, Bayamón, Carolina, Utuado, Humacao, Ponce, Cayey y Mayagüez están en huelga. Por otro lado, Aguadilla (tiene paralización intermitente), Arecibo (decidió ayer acabar la huelga y comenzar una «lucha de portones abiertos», aunque tiene receso hasta el 22 de mayo) y Ciencias Médicas no están cerrados.
Carta a Wilmarí De Jesús, sobre conducta culposa by Victor Torres on Scribd