Por: Nathalie López Del Valle / ANLS
La Junta de Supervisión Fiscal (JSF) exigió aumentos en la matrícula y recortes adicionales de personal y fondos a la Universidad de Puerto Rico (UPR), en una carta dirigida al gobernador Ricardo Rosselló el pasado 30 de agosto.
La carta enumera los problemas que la JSF encontró en el plan de presupuesto de la UPR. Concluyeron que las proyecciones del plan fiscal de la UPR no cumplen con las demandas de la ley PROMESA.
El documento señala que se debe proveer información exacta sobre la población de estudiantes matriculados este semestre, la cual sufrió una reducción de 4% en comparación con el año anterior, para poder ajustar el plan fiscal apropiadamente.
Entre los ajustes concretos al plan fiscal que demanda la Junta están los siguientes: reducciones al número de exenciones de matrícula, un aumento al costo del crédito de la matrícula de estudiantes graduados, una reducción en los fondos federales para el uso de la universidad, un corte al bono de Navidad de los empleados y una reducción progresiva a los beneficios laborales de empleados retirados.
Los nuevos recortes serán un golpe más para el estudiantado que sufrió un aumento de matrícula de $55 a $115 por crédito este semestre. De acuerdo con el plan fiscal de la UPR, estos aumentos del costo de matrícula se traducirán en ingresos de $52.4 millones. Sin embargo, el plan de la JSF quiere que la cantidad de ingresos alcance los $93.9 millones.
Adicionalmente, expresaron que los aumentos serían más apropiados para programas graduados como: juris doctor, odontología, medicina y doctorados, para que “reflejen mejor los costos de programas comparables en universidades privadas de la Isla y en Estados Unidos”.
La entidad federal también propuso que se eliminarán las exenciones de matrículas para todo alumno que no fuera estudiante de honor o familia de un veterano. En otras palabras, estudiantes que reciben exenciones por atletismo, hijos de facultad, entre otros, perderían por completo este beneficio para el próximo año académico.
Los empleados también se verán enfrentados con un recorte sustancial a las aportaciones mensuales de sus planes médicos. Además, la JSF sugiere una reducción de personal que resultará en ahorros de $28.7 millones.
Efraín Rodríguez Ocasio, representante estudiantil ante la Junta de Gobierno, expresó que no estaba sorprendido con la carta, ya que considera que la posición de la JSF no ha cambiado desde su inauguración.
El representante estudiantil considera que la JSF sigue intentado de comparar, o convertir, a la UPR en una institución privada, incurriendo en costos de matrícula similares.
Asegura que el golpe de estas medidas presupuestarias será sentido no solo por la comunidad estudiantil y la facultad, sino por todo el país, ya que las familias de los directamente afectados también tendrán que ajustarse a los nuevos gastos.
No obstante, Rodríguez Ocasio hace un llamado a la comunidad universitaria a continuar el diálogo y gestionar para poder apoyarse mutuamente en momentos de austeridad económica.
La UPR tendrá hasta la medianoche del próximo viernes para proponer un nuevo plan fiscal que cumpla con las demandas de la JSF y PROMESA.
