Por: Víctor Torres Montalvo / Twitter: @motinsitepegas
Foto: Víctor Rodríguez Bultrón/Pulso Estudiantil
El aumento en la matrícula ya es un hecho para el estudiantado de la Universidad de Puerto Rico (UPR), tras la Junta de Gobierno (JG) aprobar hoy el nuevo plan fiscal que regirá el futuro de la institución por los próximos diez años.
Con 5 votos a favor y 4 votos en contra, el cuerpo con mayor gobernanza decidió dar paso a un documento que contiene nuevos costos, aumentos en costos ya existentes, incremento en ingresos y disminución en gastos operacionales.
Alejandro Camporreale Mundo, representante de la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal (Aafaf), entendió que aun con los aumentos en la matrícula la premisa es que en el año 2026 se mantendrían los 62,000 estudiantes que actualmente tiene el Sistema UPR. A eso, Norberto González, director de la Oficina de Finanzas, añadió que la universidad pública seguirá siendo la de más prestigio con todas las medidas que se tomarán.
Igualmente, en la reunión se dejó claro que habrá un déficit en la academia aun cuando se implementen todas las medidas fiscales. Al año 2018 serán $95 millones, pero al llegar al año 2026 el monto total será de $519 millones. Si las ideas contempladas terminan en no ingresar lo esperado, González indicó que el déficit será mayor.
Algunas de las medidas que el plan contempla son:
Un aumento en la matrícula que incrementaría de $56 a $115 dólares el crédito subgraduado y de $140 a $270 dólares el crédito graduado, comenzando en agosto del 2018. Eso significaría un costo total del año académico de $3,765 y $3,785 dólares, respectivamente. Sin embargo, si los recortes continúan o si no se llega a los recaudos pensados, para el año 2023 el costo podría subir a $138 y $324 dólares.
A su vez, habría un subsidio ajustado a los ingresos que tomaría como base la misma fórmula utilizada para determinar si el estudiante recibe la Beca Pell. El monto total de esa ayuda es de $50 millones por año, pero solo está garantizado para el 2019 y 2020, según afirmó Walter Alomar Jiménez, presidente de la JG. Luego de ese año se espera obtener el ingreso de todas las nuevas medidas para verificar si se cubrirá totalmente ese dinero. «Hay que prepararnos», dijo Alomar Jiménez.
El subsidio se trabajaría basado en la Contribución Familiar Esperado (EFC, en inglés).
Reducción en la aportación gubernamental a la UPR en $506 millones del 2017 al 2026. La reducción, por ejemplo, sería de un 22% en 2018, 43% en 2021 y 54% en 2026. Debido a esta reducción, se espera un déficit que aumentará de $95 a $159 millones entre el 2018 al 2016.
Pedir 20% más en fondos federales de los que actualmente ya se solicitan para la Beca Pell y otras ayudas estudiantiles. La idea está basada en la cantidad de dinero que reciben las universidades en Estados Unidos y cuántos estudiantes son recipientes de ese dinero., y sería implementada en todos los años que cubre el documento. Actualmente, un 70% de los estudiantes de la UPR reciben la Beca Pell.
Se aumentarán los costos para los derechos de laboratorio, derechos de graduación, cuota de mantenimiento de verano, solicitud de admisión, transcripciones y certificados, identificación estudiantil y matrícula tardía. El único renglón que se mantendría intacto sería la cuota de mantenimiento anual. Esto añadiría $6.4 millones a los $17.9 millones que se obtienen hoy por concepto de esos cargos.
Se añadirán nuevos costos en: darse de baja parcial, darse de baja total y repetir cursos. El dinero que se estima se sacaría de esos procesos son $70 mil, $40 mil y $100 mil dólares, respectivamente.
Habrá una disminución de 25% en las exenciones de matrícula y otro 25% en becas estudiantiles. Por ejemplo, se retirarán unos $3.7 millones a las exenciones de los atletas, $3.4 millones a los hijos de empleados, $1.8 millones a las bandas musicales y $67 mil a las cheerleaders.
Manteniendo la idea del plan fiscal de la expresidenta Nivia Fernández Hernández —que la JG rechazó— se consolidarán algunos servicios administrativos en cuatro hubs que serían Río Piedras, Mayagüez, Ciencias Médicas y Cayey. Conjuntamente, se hará una consolidación académica luego de que analizar los programas académicos existentes y decidir si ponerlos en moratoria, mejorarlos o eliminarlos del recinto o a nivel sistémico. El documento, que hace constar que la consolidación no significa un cierre completo de los recintos, no dice fecha de inicio pero señala el 2022 como año final de la implementación.
Las medidas fueron trabajadas por que Zoraida Buxó Santiago, vicepresidenta del cuerpo; Gloria Butrón Castelli, secretaria de la junta; Gilberto Domínguez Escalera, representante estudiantil graduado; y Camporreale Mundo trabajaron para generar más dinero están las siguientes:
La reunión la presidió Buxó Santiago y estuvieron presentes Butrón Castelli; Camporreale Mundo; Domínguez Escalera; Antonio Monroig, miembro; Luis Berríos Amadeo, miembro; Darrel Hillman Barrera, presidente de la UPR; González, director de la Oficina de Finanzas; y José Juan Estrada, director asociado de la Oficina de Presupuesto.
Alomar Jiménez, presidente de la JG; Eric Pérez Torres, representante del Departamento de Educación; Efraín Rodríguez Ocasio, representante estudiantil subgraduado; y Alan Rodríguez, representante claustral, estuvieron vía teléfono.